El maestro veterano que supo adaptarse a los tiempos de pandemia

Está por cumplir 30 años de docencia, su pasión es estar al frente de un salón de clases.

“Es difícil cuando te enfrentas a situaciones de padres de familia, de inasistencias, de rezago, de mala alimentación en las familias, en los niños, pero es bonito cuando lo haces por pasión y porque disfrutas lo que estás haciendo”, dijo el maestro Efrén Ramos.

Efrén Ramos es uno de los 70,000 maestros de Jalisco que han redoblado esfuerzos en tiempos de pandemia.

“Sí ha sido difícil porque se ha ido rezagando la educación, no es lo mismo trabajar a distancia por varias situaciones dentro de los grupos que atendemos. Por ejemplo, en estas comunidades en las que estamos trabajando, el contexto es difícil porque a veces los niños no cuentan con internet, no cuentan con las herramientas necesarias para conectarse o un celular bueno que tenga Whatsapp en donde nos podamos comunicar”.

“El protocolo empieza desde casa, desde los padres de familia. Nosotros recomendamos que debe de vigilar al niño, que no venga enfermo, que venga bien alimentado, que traiga su cubrebocas y aparte nosotros les estamos solicitando un kit individual a cada niño, traen su gel, sanitizante, toallita para limpiar su lugar y el cubrebocas no se lo quitan, solo en el recreo al aire libre para desayunar”, dijo Ramos.

Es maestro pero también director de la primaria Juan Escutia, él se siente orgulloso de forjar profesionales.

“Tengo algunos exalumnos que ya son abuelitos, otros que ya son profesionistas, tenemos médicos, contadores, nutriólogos, tenemos la ventaja que aquí acuden para que uno les apoye con su servicio social o aportar algunas pláticas con nuestros alumnos. Siempre se les brinda apoyo y dice que tienen las puertas abiertas, entonces nos da gusto cuando regresan”, aseguró el también director.

En medio de la pandemia la labor de un maestro tuvo mayor relevancia por adaptarse a la nueva realidad para sacar adelante la educación.