Hoy su tiempo lo dividen en labores, de casa, búsqueda y su nuevo negocio; se trata de madres, padres y hermanos que viven desconsolados por la desaparición de un familiar.
Dicen que buscar a sus parientes no solo desgasta el alma, les quita fuerzas, y los ha dejado sin empleo, o sin sustento, es por eso que la buena voluntad de donadores organizados los impulsó a abrir su propio negocio, se trata de 10 familias que colocaron igual número de puestos en un corredor gastronómico con gran variedad de platillos.
Apenas una semana y poco a poco consiguen más clientes, platicamos con doña Beatriz Quintero, quien busca a su hijo Cuauhtémoc de 33 años desaparecido en octubre del 2020, nos contó que la ausencia de su hijo les cambió la vida drásticamente, pero aún así no se dan por vencidos y siguen su lucha para encontrarlo, porque no pierde la esperanza de localizarlo con vida, en su caso, Doña Beatriz se quedó a cargo de los hijos de Cuauhtémoc, ella tiene que sacar adelante a sus nietos, es por eso que puso un puesto con tradicionales gorditas rellenas de una gran variedad de guisados.
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En total son 40 familias que serán apoyadas por ciudadanos, organizaciones y empresarios para poner su propio negocio en distintos puntos de la metrópoli en Guadalajara. En el corredor gastronómico de Chapultepec hay 10 familias con puestos de comida financiados y ubicados en la calle Marsella, a unos pasos de la glorieta de las y los desaparecidos.
Frente a las familias hay un enorme mural que las acompaña, en él están plasmados los nombres de sus hijos o parientes desaparecidos y también se muestran dos manos estrechadas que representan la esperanza, una esperanza que no se pierde de encontrarlos y que pese a su ausencia ellos mantienen un profundo cariño, y mejores recuerdos.
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