Halloween y el Día de Muertos se han convertido en una temporada de innovación y negocio. Lo que antes se resolvía comprando disfraces o decoraciones genéricas, hoy es una oportunidad para emprender.
La personalización emocional está transformando las celebraciones: los consumidores buscan experiencias únicas y objetos con significado. Esta tendencia, parte de un movimiento global, impulsa a miles de microemprendedoras mexicanas que diseñan, producen y venden productos personalizados desde casa.
¿Por qué Halloween se volvió una oportunidad para emprender?
El mercado global de artesanías supera los 739 mil millones de dólares, y el sector DIY (hazlo tú mismo) alcanza más de 44 mil millones, según Grand View Research y The Business Research Company. En México, más del 65% de las emprendedoras reportaron un aumento en la demanda durante Halloween, creando hasta 150 piezas únicas por temporada. Según Yanelly Reyes, directora de Comunidades de Cricut en Latinoamérica, este fenómeno convierte la creatividad en fuente de ingresos y fortalece la economía cultural.
Las familias mexicanas destinan más de 40 mil pesos al año a celebraciones, de acuerdo con datos de la UNAM, y el crafting permite canalizar parte de ese gasto hacia productos locales, personalizados y sostenibles.
Así, Halloween deja de ser una fecha de consumo masivo para transformarse en una experiencia emocional, creativa y rentable.
Cabe recordar que el crafting es el término en inglés para la elaboración o creación de objetos de forma artesanal y manual, utilizando habilidades, creatividad y materiales.
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