Un balón de fútbol es lo que une a los hermanos López Lares, quienes en estos pequeños momentos de diversión se olvidan de los largos días que pasan en los hospitales.
Payito tiene 10 años y desde temprana edad fue diagnosticado con cáncer de células, una batalla que sigue luchando todos los días de su vida.
Por otro lado su hermanita de cuatro años; Rebe. El año pasado se le diagnosticó síndrome de Prader Willi y Púrpura Trombocitopénica.
“Ya somos los dos luchando contra la enfermedad, que sea valiente cuando le sacan sangre, que no se rinda y muchas cosas”, comentó Pablo, “Payito”.
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Ariadna es la hermana mayor y con apenas 13 años, se ha convertido en el motor de sus hermanos y el pilar de su madre. Su único deseo para este día de Reyes Magos es ver a sus hermanos venciendo sus respectivas enfermedades.
“La verdad, los balones, pero antes de los balones me gustaría la salud de mis dos hermanitos, la verdad, quisiera estar en el lugar de ellos, porque es muy triste ver que le saquen sangre, los internen, les hagan muchos estudios y me gustaría ayudarlos en algo pero no puedo”, dijo Ariadna López Lares.
La inocencia de la pequeña Rebe la hace olvidarse de todo y tener la ilusión de recibir un juguete este próximo 6 de enero.
“Una casita de peluches, para jugar con ellos”, dijo Rebeca López Lares.