Un concierto de Katy Perry en Detroit terminó en un momento inesperado cuando una fanática identificada como Maquina se desmayó justo en el escenario. Esto ocurrió mientras la cantante repartía instrumentos a sus fans invitados, como parte del emotivo segmento en que interpreta The One That Got Away.
La reacción de Katy fue inmediata: se arrodilló para asistir personalmente a la joven mientras el equipo médico llegaba. El público comenzó a corear el nombre de la fan para darle ánimo, generando una atmósfera de solidaridad total.
Ya con la chica a salvo y siendo atendida fuera del escenario, Katy Perry decidió permanecer con los demás fanáticos, con quienes compartió una oración, cerrando el momento con empatía y cariño.
Con información de Karla Gallegos.