Los morenistas se mantienen firmes en celebrar sus 7 años en el poder, a pesar de que México ha perdido miles de millones de pesos en obras faraónicas que, según la información, han servido como distractor para ocultar actos de corrupción. La refinería Dos Bocas en Tabasco es un ejemplo de este derroche, con un costo que pasó de 150,000 millones de pesos a más del triple de lo estimado, y se espera que supere los 500,000 o 600,000 millones debido a integraciones pendientes.
Otro proyecto costoso es el Tren Maya, que ha destruido selvas y cenotes, y ha devorado casi tres veces su presupuesto inicial. Para 2026, los contribuyentes deberán aportar otros 30,000 millones de pesos para su operación, ya que no genera ganancias. En 2024, sus ingresos propios fueron de 300 millones de pesos, mientras que su costo de operación superó los 2,800 millones de pesos, cubriendo solo el 10% de lo necesario.
Se proyecta que para 2026 solo generará cuatro de cada 100 pesos requeridos para operar, lo que significa que los mexicanos seguirán subsidiando este proyecto. Otras obras faraónicas que no prosperaron, como la cancelación del aeropuerto de Texcoco, el AIFA y la operación de Mexicana de Aviación, han significado un gasto de casi 440,000 millones de pesos. En resumen, el sello de los últimos 7 años ha sido el despilfarro del dinero de los mexicanos.
Con información de: César Méndez
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