
La llamada “Ley Cazzu” tomó relevancia pública luego de que la cantante argentina Cazzu diera a conocer las dificultades legales para obtener el permiso de viaje de su hija, compartida con el cantante mexicano Christian Nodal. En septiembre de 2025, durante una participación en un pódcast, explicó que la falta de firma del otro progenitor limitó su actividad laboral fuera del país durante más de un año, a pesar de que su trabajo requiere desplazamientos constantes.
A partir de estas declaraciones surgió una petición ciudadana en Argentina difundida en la plataforma Change.org bajo el título “Ley CAZZU – Libertad con nuestros hijos”. El documento plantea que, cuando exista abandono comprobado, el adulto que ejerce la crianza diaria pueda obtener un permiso estable para viajar con sus hijos, evitando múltiples trámites y procedimientos judiciales cada vez que se requiere salir del país.
Los impulsores de la iniciativa señalan que las legislaciones de varios países latinoamericanos exigen la firma de ambos progenitores para autorizar viajes de menores, incluso cuando uno de ellos está ausente de la crianza. Afirman que este requisito puede convertirse en un obstáculo que afecta directamente a los menores, ya que los procesos suelen ser largos, costosos y dependen de sistemas judiciales saturados.
La propuesta busca dar certeza jurídica a las familias monoparentales, reducir trámites repetidos y priorizar el interés superior de niñas, niños y adolescentes en contextos donde un solo adulto asume la responsabilidad económica y emocional. También plantea que un permiso permanente permitiría mayor estabilidad en actividades educativas, médicas y laborales relacionadas con la movilidad.
Podría interesarte: “Tenemos más en común que un hombre”: Cazzu habla de la conversación que tuvo con Belinda
Aunque la iniciativa es impulsada desde Argentina y no representa una ley vigente, ha motivado la discusión sobre la adecuación de los permisos de viaje en casos de abandono parental. Se prevé que la petición sea presentada ante autoridades legislativas, mientras continúa reuniendo firmas.
En México, el tema se relaciona con tres áreas principales: expedición de pasaportes, salidas del país y consecuencias legales del abandono. Actualmente, la Secretaría de Relaciones Exteriores requiere el consentimiento de ambos progenitores para tramitar pasaportes de menores, salvo cuando existe sentencia judicial de pérdida o suspensión de patria potestad. Para la salida del país, el Instituto Nacional de Migración utiliza el Formato de Salida de Menores y otros mecanismos de autorización que buscan prevenir la sustracción de menores.
El abandono, por su parte, debe acreditarse mediante un proceso judicial que puede derivar en la pérdida o suspensión de la patria potestad. Una vez que existe resolución, el progenitor que conserva este derecho puede realizar trámites y autorizar viajes sin depender de la firma del otro. Esto representa una diferencia importante con la propuesta impulsada en Argentina, que plantea un permiso permanente sin necesidad de procesos adicionales.
Aunque los marcos jurídicos difieren, la discusión coincide en el objetivo de evitar que los permisos de viaje se utilicen como un instrumento de control en conflictos parentales y en la importancia de proteger la movilidad y estabilidad de los menores. El debate continúa abierto y la iniciativa sigue en proceso de recolección de firmas.
Podría interesarte: ¿Christian Nodal está libre de acusaciones? FGR aclara caso del cantante










