Preocupación e inconformidad se viven en el municipio de Tequila luego de que el presidente municipal, Diego Rivera Navarro, ordenara la intervención de una tequilera sin ofrecer explicación alguna. La medida incluyó una fuerte movilización de entre ocho y diez patrullas municipales, que cerraron por completo el acceso a la empresa, nadie entra y nadie sale por instrucción directa del alcalde.
Esta no es la primera ocasión en que el alcalde enfrenta acusaciones de abuso de poder. Anteriormente se le ha señalado por atacar la libertad de expresión, luego de la detención de un reportero gráfico, así como por su intento de apropiarse del Museo Nacional del Tequila, un inmueble público.
Hasta el momento, el presidente municipal no ha emitido ninguna postura oficial sobre la intervención y cierre de la tequilera, incrementando la incertidumbre y el malestar entre los habitantes del municipio.
Con información de: Gustavo Cárdenas
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