Los vecinos de la colonia La Calma, en Tonalá, describen sus calles como un verdadero circuito de obstáculos. Entre charcos de lodo, banquetas inexistentes y cruces que parecen pruebas extremas, caminar por la zona se ha convertido en una experiencia riesgosa y agotadora, sobre todo para adultos mayores y personas con movilidad reducida.

A pesar de que el Ayuntamiento había anunciado la rehabilitación con concreto hidráulico, los trabajos no han comenzado y las condiciones empeoran con cada lluvia. Los vecinos señalan que incluso cuando intentan arreglar por su cuenta algunos tramos, las propias autoridades terminan destruyendo lo poco que logran improvisar.

CON INFORMACIÓN DE: ANTONIO SÁNCHEZ

TE PUEDE INTERESAR: Ciclovía en modo supervivencia: denuncian abandono de vía ciclista en Tonalá