El Buró de Crédito concentra información financiera de personas y empresas en México y es utilizado por instituciones bancarias, comercios y prestadores de servicios para evaluar solicitudes de financiamiento. Una de las dudas recurrentes entre los usuarios es si es posible eliminar un mal historial crediticio y cuánto tiempo permanecen los registros negativos.
Podría interesarte: Difunden video del choque de tráiler que derivó en incendio en la Manzanillo–Colima
De acuerdo con la legislación que regula a las Sociedades de Información Crediticia, como Buró de Crédito y Círculo de Crédito, la información registrada no puede ser modificada ni eliminada de forma arbitraria. La ley vigente desde 2002 reconoce el derecho de los usuarios a consultar, de manera gratuita una vez al año, su Reporte de Crédito Especial, en el que se detallan adeudos, pagos y movimientos financieros.
Los adeudos no liquidados pueden permanecer en el historial crediticio hasta por seis años, contados a partir de la fecha del último incumplimiento. Una vez transcurrido ese periodo, el registro debe eliminarse siempre que el monto no exceda los límites establecidos por la ley, no exista un proceso judicial en curso y no se detecten irregularidades o fraude.
Cuando una deuda es pagada, el crédito cambia su estatus a “cerrado” y continúa visible en el historial por un plazo similar, como constancia del cumplimiento de la obligación. Asimismo, los créditos activos se reportan de forma mensual, aun cuando no presenten saldo pendiente.
La normativa establece que no es posible eliminar registros negativos fuera de los tiempos legales, por lo que los servicios que ofrecen borrar el historial crediticio de forma inmediata carecen de sustento legal. La eliminación de un registro negativo tampoco implica la extinción de la deuda, ya que el acreedor conserva el derecho de cobro conforme a la ley.
También puedes leer: Estas son las carreras que serán obsoletas en el futuro, según la inteligencia artificial
El manejo adecuado del historial crediticio depende del cumplimiento de las obligaciones financieras y de la revisión periódica del reporte, como único medio para verificar la información registrada y detectar posibles errores.
