Es la forma en la que una persona responde ante la negativa que obtuvo al querer ingresar al Tren Ligero.
La persona ofende en reiteradas ocasiones a la encargada y luego solicita a un policía se acerque a dialogar con ella.
El elemento le explica que no puede ingresar porque está alcoholizada y en esa condición el acceso es restringido. El uniformado sale del módulo de acceso y le pide que se retire.
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A través de su cuenta oficial el SITEUR, explicó que el reglamento prohíbe el acceso a personas bajo los influjos de alcohol o drogas, así como a quienes busquen alterar el orden por lo que los dos trabajadores del tren aplicaron el reglamento.
El video viralizado en redes sociales ha generado opiniones divididas y no sobre si debía o no pasar la persona, sino si se debía detenerla o no por faltarle el respeto a la autoridad.
