La generación Z encabezó movilizaciones en todo el país para protestar contra la inseguridad y el rumbo del gobierno. En Guadalajara más de 20 mil personas marcharon desde la Glorieta de los Niños Héroes hasta Avenida Manuel Acuña usando la imagen del alcalde asesinado Carlos Manzo como símbolo de indignación. Jóvenes, familias y colectivos exigieron paz y responsabilizaron al partido en el poder por la violencia.
En Ciudad de México miles se reunieron en el Ángel de la Independencia para avanzar hacia el Zócalo con consignas contra la inseguridad y el autoritarismo, incluyendo un contingente de Uruapan que pidió justicia por Manzo. Aunque surgieron intentos de violencia y elementos policiales respondieron con gas lacrimógeno, la protesta mantuvo su carácter pacífico y destacó la inconformidad de una generación que ya no quiere permanecer en silencio.
Con información de: Ricardo Torres
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