Se acabó un amor que parecía trascender la vida y la muerte. Amanda Teague, una mujer de Irlanda del Norte, reveló que se divorció del supuesto fantasma de un pirata haitiano con el que había celebrado una ceremonia espiritual en 2016.
El caso llamó la atención de medios británicos y de la televisión local, ya que Amanda relató que su “marido”, de más de 300 años de edad, comenzó a mostrar conductas posesivas y a afectar directamente su salud.
¿Cómo inició la relación entre Amanda y el pirata fantasma?
La historia comenzó en 2010, cuando la mujer atravesaba el duelo por la muerte súbita de su hijo. En ese proceso se acercó a ritos celtas, prácticas wicca y chamanes que aseguraban comunicarse con los muertos. Fue entonces cuando, según Amanda, conoció a Jack, un pirata haitiano fallecido siglos atrás.
Tras seis años de “cortejos espirituales”, en 2016 accedió a casarse con él en una ceremonia chamánica realizada en alta mar. Un médium ofició la unión en representación del difunto.
¿Por qué Amanda decidió divorciarse del pirata?
Al poco tiempo de la unión, Amanda empezó a notar un deterioro en su salud. Algunos chamanes le advirtieron que el pirata estaba drenando su energía vital.
Al confrontarlo, asegura que Jack lo negó y llegó a amenazarla con “matarse” si lo dejaba, además de dañar a sus hijos y seres queridos. Finalmente, en 2019 buscó ayuda espiritual y, tras un despojo, las apariciones cesaron.
¿Qué mensaje dejó Amanda tras su experiencia?
Actualmente, Teague comparte su historia para alertar sobre los riesgos de involucrarse en prácticas de espiritismo y rituales de este tipo, que ella describe como “muy reales” y potencialmente dañinos.
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