Hablemos de Cine | El padrecito de Cantinflas, la película que llegó al Vaticano
El Papa pidió ver El padrecito y terminó guardando una copia en la filmoteca vaticana.
En los años 60, Cantinflas conquistó con El padrecito, filme que retrataba a un joven sacerdote en tono de comedia. Aunque se temía que la Iglesia se ofendiera, ocurrió lo contrario: el Papa Pablo VI pidió una copia y quedó tan sorprendido que decidió resguardarla en la filmoteca del Vaticano. Con ello, la cinta demostró que el humor, tratado con respeto, puede trascender fronteras y credos. El carisma de Mario Moreno logró algo único: arrancar sonrisas hasta en los pasillos más solemnes de la Santa Sede.
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