Adiós al rastro del glamour: Tips caseros para eliminar las manchas de maquillaje de tus almohadas
¿Te has despertado con el rostro limpio pero tu funda hecha un desastre? Descubre cómo borrar hasta la última huella de maquillaje con trucos que parecen magia doméstica.
Una noche cualquiera, después de una cena especial o simplemente un largo día, te rindes al sueño sin pensar en el maquillaje que llevas puesto. Al amanecer, la escena es familiar: tu almohada blanca, marcada por base, rímel o labial como si hubiera estado en el campo de batalla. A todos nos ha pasado. Pero no todo está perdido. Lo que parece un desastre textil tiene solución, y aquí te contamos paso a paso cómo rescatar tus fundas y dejarlas como nuevas, sin sacrificar horas ni usar productos costosos.
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¿Qué necesitas tener a la mano antes de empezar?
Primero, identifica la mancha: no es lo mismo un rastro de base líquida que una sombra en polvo. Para la mayoría de los casos, bastará con tener a la mano agua micelar, jabón lavatrastes, bicarbonato de sodio y vinagre blanco. También, un cepillo suave o un cepillo de dientes viejo será tu mejor aliado. No uses agua caliente, ya que fija la mancha. En cambio, comienza siempre con agua fría.
¿Cómo aplicar el tratamiento sin arruinar la tela?
Coloca un paño seco debajo de la mancha para no transferirla a otras partes. Luego, aplica agua micelar directamente sobre la mancha y frota suavemente con el cepillo. Después, mezcla jabón lavatrastes con un poco de agua y vuelve a cepillar. Deja actuar cinco minutos. Si la mancha persiste, añade una pasta de bicarbonato y vinagre, deja burbujear, frota y enjuaga.
¿Y si la mancha no quiere irse?
Si aún queda residuo, lava la funda en la lavadora como normalmente lo haces, pero añade media taza de vinagre al ciclo. ¡No te preocupes! El olor desaparecerá al secar. Este paso final ayuda a desintegrar los últimos rastros del maquillaje rebelde. Lo más importante: actúa rápido, cuanto más fresca la mancha, más fácil será borrarla.
Así que la próxima vez que olvides desmaquillarte, recuerda: hay esperanza para tus fundas, solo necesitas los aliados correctos… y un poco de paciencia.
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