Una enfermera británica fue sentenciada a 15 meses de prisión luego de haber utilizado una jeringa contaminada durante la atención de un paciente con cáncer, acto que provocó el retraso de su tratamiento y generó una fuerte reacción en el sistema de salud del Reino Unido.
La responsable, identificada como Sinclair, de 30 años, cometió las malas prácticas médicas durante una visita a una escuela, en compañía de una estudiante de medicina.
Emma Sinclair, jailed for 15 months.https://t.co/DugqmOzMyy pic.twitter.com/SnibyPBgbq
— Jenn 💙 (@crochetjenny) November 4, 2025
¿Cómo ocurrió la contaminación con las jeringas?
Las investigaciones revelaron que la enfermera visitó a varios pacientes menores de edad el 6 de febrero de 2024, entre ellos dos que se encontraban bajo tratamiento contra el cáncer. En uno de los procedimientos, mezcló jeringas usadas con utensilios nuevos al vaciar el contenedor de desechos médicos, lo que provocó la contaminación de las muestras.
El error, considerado una negligencia grave, afectó directamente la atención de al menos dos pacientes, cuyos procesos de quimioterapia debieron posponerse debido al riesgo sanitario generado.
¿Qué determinó la justicia británica?
Durante el juicio celebrado en el condado de Hampshire, Inglaterra, el fiscal David Finney detalló que el uso de jeringas contaminadas quedó plenamente comprobado y que la enfermera actuó con falta de cuidado y supervisión profesional.
Por su parte, el juez Nigel Peters calificó los hechos como una “traición al deber médico” y lamentó que la acusada no mostrara arrepentimiento genuino tras lo ocurrido.
“Has carecido de auténtico arrepentimiento y has hecho numerosos intentos por evadir responsabilidad por lo sucedido. Esta corte no puede omitir la gravedad de esta situación”, sentenció el magistrado.
La mujer permanecerá un año y tres meses en prisión, mientras el hospital involucrado en el caso revisa sus protocolos de bioseguridad para evitar que una situación similar vuelva a repetirse.
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