La música no solo acompaña, también transforma. Cada generación ha tenido una canción que se convierte en bandera, en revolución sonora y cultural. En el marco del Día Internacional de la Música, recordamos cinco piezas que cruzaron fronteras y demostraron que una melodía puede cambiar la historia.

¿Por qué ‘Bohemian Rhapsody’ de Queen cambió la música?

Cuando Queen lanzó este tema en 1975, nadie entendía cómo una canción podía durar seis minutos y mezclar ópera, rock y balada. ‘Bohemian Rhapsody’ rompió todos los esquemas de la radio comercial y terminó convirtiéndose en un clásico inmortal que sigue llenando estadios y playlists medio siglo después.

¿Qué hizo a ‘Like a Rolling Stone’ de Bob Dylan tan revolucionaria?

En 1965, Dylan electrificó el folk con este tema de seis minutos lleno de poesía cruda y crítica social. ‘Like a Rolling Stone’ marcó un antes y un después, no solo en la carrera del artista, sino en la manera en que se escribían canciones: más largas, más intensas y más comprometidas.

¿Cómo The Beatles desataron una fiebre global con ‘I Want to Hold Your Hand’?

El sencillo de 1963 fue el que encendió la llamada ‘Beatlemanía’. Con una melodía simple y un coro irresistible, la canción cruzó océanos y convirtió a cuatro jóvenes de Liverpool en los rostros de una revolución cultural juvenil que aún resuena.

¿Por qué ‘Strange Fruit’ de Billie Holiday es un himno contra el racismo?

En 1939, Billie Holiday interpretó esta pieza que denunciaba la violencia racial en Estados Unidos. Su voz, cargada de dolor, convirtió ‘Strange Fruit’ en una de las primeras canciones de protesta del siglo XX y en un referente cultural para la lucha por los derechos humanos.

¿Qué representa ‘Sunday Bloody Sunday’ de U2 en la historia musical?

Lanzada en 1983, esta canción se convirtió en un grito de paz frente a los conflictos en Irlanda del Norte. Con guitarras enérgicas y una letra poderosa, U2 convirtió la música en un altavoz para la conciencia social y política en pleno auge del rock mundial.

Estas canciones son más que notas: son capítulos de la historia. Desde el dolor de Holiday hasta la energía de Queen, cada una recuerda que la música no solo se escucha, también se siente, se vive y se convierte en memoria colectiva.