El deporte no solo está hecho de triunfos. También tiene historias que duelen, porque hay figuras que parecían destinadas a brillar por décadas y, sin embargo, el destino les puso fin antes de tiempo. Aquí repasamos cinco leyendas que murieron jóvenes, pero que nunca dejaron de inspirar.
¿Qué deportistas fallecieron jóvenes y siguen siendo recordados como leyendas?
Ayrton Senna (34 años)
El brasileño era pura velocidad y carisma. Tres veces campeón del mundo de Fórmula 1, Senna murió en 1994 durante el Gran Premio de San Marino, a los 34 años. Su accidente cambió para siempre las normas de seguridad del automovilismo, y su nombre se mantiene como sinónimo de perfección al volante.
Kobe Bryant (41 años)
La “Mamba” fue más que una estrella de la NBA: fue un ejemplo de determinación. Bryant falleció en 2020, a los 41 años, junto a su hija Gianna en un trágico accidente de helicóptero. Su mentalidad ganadora trascendió el deporte y hoy sigue siendo inspiración dentro y fuera de la cancha.
Diego Armando Maradona (60 años)
Maradona no solo jugó fútbol: lo reinventó. El ídolo argentino murió en 2020 a los 60 años, víctima de un paro cardiorrespiratorio. Aunque su vida fue un torbellino, su talento y su influencia son parte de la cultura popular mundial.
Florence Griffith Joyner “Flo-Jo” (38 años)
Fue, y sigue siendo, la mujer más rápida del planeta. Con récords que aún no se rompen, Flo-Jo falleció a los 38 años mientras dormía. Su estilo, su fuerza y su sonrisa la convirtieron en una figura única dentro del atletismo.
Emiliano Sala (28 años)
El delantero argentino estaba a punto de cumplir su sueño: jugar en la Premier League. Pero su historia terminó de forma trágica cuando el avión en el que viajaba rumbo a Cardiff se estrelló en el Canal de la Mancha. Tenía apenas 28 años. Su muerte conmovió al mundo del fútbol y dejó una huella profunda en la afición.
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