Desde los descubrimientos de oro en Uganda, el templo de Zeus en Egipto y la carretera a la Atlántida, los arqueólogos están dando mucho de qué hablar, ahora volvemos al país de las pirámides para satisfacer la curiosidad de muchos: ¿cómo fue que lograron los egipcios una alineación perfecta de las pirámides de Guiza con las constelaciones?
Los científicos por fin dieron con esta respuesta.
Arqueólogos de Harvard encontraron la respuesta de la alineación de las pirámides de Guiza
Las ruinas de las pirámides de Guiza han sido tema de fascinación no sólo por Cleopatra, sino para personas de nuestra época que han afirmado todo tipo de locas teorías porque éstas tienen una alineación perfecta con la bóveda celeste, a lo largo de los milenios se ha dicho desde que fueron construidas como bóvedas, que fueron hechas por gigantes Babilónicos y hasta que eran “señales para que los alienígenas aterrizaran”.
Aunque nos tardamos varias décadas de búsqueda, interpretación e investigación el equipo de arqueólogos de la universidad de Harvard en Estados Unidos dirigidos por Glen Dash encontraron la respuesta y la publicaron en el Journal of Ancient Egyptian Architecture, donde sorprendió a todos por la sencilla pero compleja respuesta de la alineación perfecta de estas pirámides con la constelación de Orión: los constructores siguieron al sol en el equinoccio.
¿Por qué las pirámides de Guiza están orientadas hacia Orión?
Lo primero que se supo de estas antiguas pirámides egipcias están alineadas para la constelación de Orión usando cada pico para señalar las estrellas principales de la formación celeste o su “cinturón”.
Esto responde a que los antiguos egipcios pensaban que estos astros simbolizaban a Osiris e Isis, dos de los dioses más importantes del inframundo, los que al morir te recibirían para el Juicio Final en el “más allá”… Y aunque ahora sabemos eso, duramos milenios en entender cómo lograron alinearlas de forma perfecta sin más tecnología que la observación.
El equinoccio de otoño tiene la respuesta de la alineación de las Pirámides de Guiza
Según Glen Dash, las pirámides de Guiza alcanzaron una alineación perfecta gracias al movimiento del Sol sobre la superficie terrestre y la sombra que este deja a su paso, esto lo comprobó con el método de la “vara de gnomon”, es decir puso un palo en el Sol y a su sombra empezó a trazar ejes descubriendo durante el equinoccio de otoño que se emitía una sombra en intervalos regulares. Al final del día, consiguió una línea perfecta de este a oeste.
Es decir, hace alrededor de 4,500 años los ingenieros egipcios con errores mínimos de cálculo siguieron la sombra del sol en el equinoccio de otoño, descubriendo que incluso después de milenios, la sombra que produce el Sol sobre la superficie terrestre durante el equinoccio sigue siendo la misma.
¿Increíble, no?
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