El día que Pelé chocó en Guadalajara: La insólita noche del Rey
Antes de brillar en el Mundial, Pelé vivió una noche que pocos recuerdan, pero que dejó huella en las calles de Guadalajara.
Durante su preparación rumbo al Mundial de México 1970, Edson Arantes do Nascimento, mejor conocido como Pelé, hizo base en Guadalajara junto con la selección brasileña. La ciudad lo recibió con fervor, pero también fue testigo de una noche poco gloriosa del astro.
Uno de los momentos más curiosos ocurrió gracias a su gran amigo Ney Blanco de Oliveira, exfutbolista y representante de Pelé, quien residía en la Perla Tapatía. Tras un encuentro entre ambos, el Rey le pidió prestado su Ford Falcon modelo 1969 para salir por la ciudad.
A su regreso, ocurrió lo impensado. Pelé, afectado por su miopía una condición visual que limitó su visión durante gran parte de su carrera, confundió un muro con unos arcos pintados en el hotel de concentración, lugar de hospedaje en aquella época. Resultado: un golpe al vehículo y una anécdota que Ney nunca olvidó.
Ese pequeño accidente no opacó lo que vendría después: la consagración definitiva de Pelé como leyenda del fútbol mundial.
¿Cómo fue el rendimiento de Pelé en México 1970?
En México 1970, Pelé lideró una de las selecciones más espectaculares de todos los tiempos. El equipo brasileño, dirigido por Mário Zagallo, maravilló con su estilo ofensivo y un talento sin comparación: Tostão, Jairzinho, Rivelino, Carlos Alberto y el propio Pelé formaron un cuadro de época.
Brasil debutó con victoria 4-1 ante Checoslovaquia, siguió con triunfo ante Inglaterra (1-0) y cerró la fase de grupos venciendo 3-2 a Rumania. En cuartos de final, eliminó a Perú (4-2); en semis, despachó a Uruguay (3-1); y en la gran final, goleó 4-1 a Italia con un Pelé imparable, que abrió el marcador de cabeza y dio una asistencia magistral en el último gol del torneo.
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