¿Demasiada limpieza? Por qué convivir con bacterias podría proteger a tu bebé
Padres sobreprotectores, atentos: un nuevo estudio sugiere que exponer a los bebés a bacterias comunes podría fortalecer su sistema inmunológico
Hay papás que desinfectan cada juguete y cada superficie por la que gatea su bebé. Pero una investigación hecha en Dinamarca con 411 niños, hijos de madres asmáticas, encontró algo que podría hacerlos reconsiderar: los bebés que conviven con más bacterias durante su primer año tienen menos probabilidades de desarrollar alergias al llegar a la escuela.
Durante seis años, los científicos siguieron de cerca la salud de estos niños, y también analizaron su flora intestinal. ¿El hallazgo? Una menor diversidad de microbios en los primeros 12 meses se asoció directamente con mayor riesgo de sensibilidad alérgica, especialmente rinitis.
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¿El sistema inmune también aprende?
Al nacer, los bebés dependen del sistema inmunológico de sus madres: los anticuerpos que reciben en el útero y durante la lactancia los protegen mientras su cuerpo aprende a defenderse. Pero esa enseñanza necesita práctica.
Cuando un bebé crece en un entorno demasiado limpio o con muchos antibióticos, ya sea que los tome él o su madre, su flora intestinal cambia. Y eso puede alterar el desarrollo natural de sus defensas.
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¿Exponer a tu bebé a bacterias podría ser saludable?
Aunque el estudio no encontró relación con enfermedades como el asma o la dermatitis, sí da pie a una idea que cada vez gana más terreno: la exposición temprana a ciertos microbios comunes puede fortalecer el sistema inmune.
Claro, esto no significa exponerlos a riesgos innecesarios, pero sí tal vez dejar de temerle a cada mota de tierra. Al final, un poco de mugre también puede ser parte de crecer sano.
Así que si ves a tu bebé metiendo las manos al jardín, respira. Tal vez, mientras juega entre bichitos invisibles, está construyendo algo más grande: sus propias defensas para la vida.