Así como existe un día para recordar qué son los “Derechos de Autor” y la “Propiedad Intelectual” , también desde hace más de cuatro décadas celebramos cada 8 de junio el “Día Mundial Contra la Falsificación y la Piratería”, para explicarle a la ciudadanía porqué es importante que no adquieran bienes ni servicios de forma ilegal y tengan un consumo responsable en productos que podrían ser apócrifos como en suplementos o hasta alimentos.
¿Por qué se celebra un día contra la piratería?
Esto se debe a que se busca que la ciudadanía comprenda el valor de los derechos morales y patrimoniales que tiene un artista o inventor sobre sus obras, así como todo aquello que pueda ser sujeto a patentes para incentivar la legalidad y la protección a la creatividad.
¿Cómo se originó el Día Mundial de la Falsificación?
Esta efeméride fue creada en el año 1988 por el Grupo Mundial de Lucha contra la Falsificación (CACG), para sensibilizar a las personas de las desventajas y perjuicios generados por la fabricación y adquisición de productos falsificados, no solo por los daños a la calidad de los productos con marcas registradas así como los ingresos a sus legítimos creadores que se dejan de reconocer.
¿Qué es una falsificación?
Se conoce como falsificación a aquél producto que imita o pretende hacerse pasar por otro, deteriorando la imagen y la calidad del original, sacando privilegios ventajosos y poniendo en riesgo a la ciudadanía, (sobre todo en suplementos alimenticios o alimentos); que también afecta sus derechos básicos, tales como el derecho de garantía, devolución del producto y derecho al reclamo.
¿Es lo mismo una réplica que una falsificación?
Aunque pudiera parecer similar o hasta igual, los productos piratas no pagan impuestos y generan daños a la economía de un país; mientras que las réplicas, (como las pistolas de “airsoft” que son réplicas de equipo armamental), son claramente distinguibles, tiene visible la marca y señala de forma directa que no es el producto original sino una emulación al mismo que además tendrá derecho de reclamo o devolución.
¿Qué productos pueden ser objeto de falsificación?
Algunos productos que son objeto de falsificación y piratería son los siguientes: Obras artísticas, música, cosméticos, artículos de aseo personal (jabón, crema dental, productos para el cabello); calzado; marroquinería (bolsos, correas); medicamentos; joyería; equipos electrónicos; prendas de vestir y hasta alimentos procesados o enlatados.
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¡Siempre vigila qué estás ingiriendo es por tu salud y por los tuyos!